lunes, 6 de febrero de 2012

Toro Hawaiana (Toroburger)

Establecimiento: Toroburger (Av Jimenez con 4a)
Referencia: Toro Hawaiana
Precio (sin combo): $9,400
Precio (en combo): $14,900

Foto de la publicidad:
[No disponible]

Foto real:


Descripción oficial:

"150gr de carne con adición de piña en almíbar"

Experiencia:

Esta vez no fue planeado, simplemente los compañeros de la oficina al momento de elegir un lugar para almorzar se decidieron por Toroburguer. Yo ni corto ni perezoso acepté sin poner resistencia. Llegamos rápido porque nos gusta salir a almorzar temprano, antes de que se llenen los sitios para almorzar. Y lo logramos, estaba casi vacío, digamos que ocupado en un 10% de su capacidad.

Nos trajeron rápido la carta y recordé la que había pedido la vez pasada para no repetir. La elección era simple: cualquiera, una que no hubiera pedido. Rápidamente me llamó la atención en el menú unas que tenían una marca de "Nuevo!". Claro! eso es lo que quiero, algo novedoso, pero tengo mucha hambre como para comer una vegetariana, así que por descarte esta vez será "Toro Tropical".


... y nada que venía el mesero. En mi opinión se demoró mucho para lo vacío que estaba el sitio. Justamente por eso es que nos gusta almorzar temprano, para que nos atiendan rápido, pero esta vez no fue así. Nos tomó el pedido a los cuatro de la mesa, todas las pidieron en combo menos la mía que la pedí sin combo y con gaseosa. Hoy no me interesaban las papas, quería comerla y ya.

Pasados 5 minutos se acerca el mesero y con voz tímida nos dice que no había "Toro Tropical" (que luego fue confirmado por la cuenta oficial en twitter) que tocaba pedir otra. Lo miré a los ojos como esperando que me mostrara la carta, pero no se le ocurrió, seguro pretendía que sacara la foto que ya había tomado para ver qué otra pedía. Le pedí que me trajera una carta y la trajo al instante. Ya la boca me sabía a algo con trópico, así que pedí la Toro Hawaiana.

El tiempo que tardaron en traer el pedido estuvo bien (lo normal que dura en prepararse una), aunque las trajeron una por una, sin fijarse si ya estaba o no la gaseosa y las papas servidas, y en cada pasada el mesero nos preguntaba si faltaba algo. No estaba pendiente de cómo era el pedido, ni de quién había pedido qué. Teníamos que explícitamente decirle que nos trajera las gaseosas y las papas criollas y las francesas en cada viaje que hacía para traernos un plato. No tenía claro el pedido. La mía llegó de última, lo que me pareció normal porque a última hora me habían dicho que no había de esa referencia.

De entrada se veía muy simple, como que algo le faltaba. Las de mis compañeros de almuerzo se veían grandes y con bastantes ingredientes. La mía se veía simple, como si se les hubiera olvidado echarle algo. Así que revisé:

  • Pan
  • Tomate (una rodaja)
  • Piña (una rodaja)
  • Queso
  • Carne
  • Pan
Fin

Sí, confirmado, era demasiado simple. Aparte del pan, la carne y el queso, venía con una rodaja de tomate y una rodaja de piña y como en Toroburger las sirven sin salsas, pues más simple aún se veía. En la foto se alcanzan a ver unos residuos de lechuga en el papel de la envoltura, pero debían ser de otra que estaban preparando cerca porque la que me sirvieron a mí no traía nada más, nada de lechuga, ni siquiera otra rodajita de tomate. Así que le eché toda la salsa que pude, de todas las salsas que había.

Debo admitir que el sabor estaba muy bueno, la piña tiene su gracia, ¿quién lo hubiera imaginado? La carne tenía muy buen sabor y en esta oportunidad sí estaba bien cocida, no como la otra vez. Sin embargo estuvo muy sencilla para mi gusto y quedé con hambre. Al final me arrepentí de no haber pedido combo. Faltaron las papas.

Y pedimos la cuenta para pagar y salir. El mesero preguntó si incluiríamos la propina a lo que respondimos afirmativamente. Para ese momento el sitio ya se encontraba lleno e incluso había gente haciendo fila para poder entrar. Siempre sucede eso a la hora del almuerzo. Pasaron 10 minutos y el mesero nada que traía la cuenta y ni siquiera estaba pendiente de nosotros con todas las muecas que hacíamos para que volteara a mirar. Sabíamos que nunca nos iba a traer la cuenta así que pasados unos 12 minutos nos paramos de la mesa y fuimos a la caja a pagar. Para entonces ya habíamos decidido no pagar la propina pues la atención del mesero realmente no fue buena. En el sistema, antes de imprimir la factura se veía que aún aparecía registrada la Toro Tropical que tenían agotada en lugar de la Toro Hawaiana que me habían servido. Aunque tenían el mismo valor, se nota que el mesero no tuvo la delicadeza de cambiar la orden. Tal vez pude haber pedido otra cosa con otro valor y él no hubiera cambiado el recibo. Pero por fortuna revisamos.

Al final ir al sitio temprano, antes de que se llenara no funcionó. El mesero nos hizo perder mucho tiempo. Hoy no me sentí bien atendido, pero realmente no culpo al sitio, creo que fue el mesero. La vez pasada nos atendieron muy bien en la sede de la 94A con 11A. Esta vez no fue así, pero tendrán otra oportunidad, aún quedan varias por probar.

2 comentarios:

  1. Culpar a los meseros es taaan facil.. pero bueno.. Respetable...

    ResponderEliminar
  2. Pues en este caso creo tener argumentos suficientes: se demoró en hacernos el pedido luego de que nos entregó las cartas; no tenía claro el pedido que habíamos hecho y se confundía con facilidad; nunca nos trajo la cuenta pero sí pidió que le incluyéramos la propina (en lugar de traernos la cuenta, se ponía a arreglar otras mesas y a atender otras personas, incluso tenía espacios libres donde ni siquiera volteaba a mirarnos). No es injustificada mi queja, realmente para mí el mesero tuvo la culpa de muchas cosas. Nos demoramos 1h en el almuerzo y se supone que son comidas rápidas.

    ResponderEliminar